Los bumangueses no se sienten tranquilos en las calles, según lo pudimos establecer en Vanguardia cuando salimos a preguntarles...
U no de los grandes retos de la alcaldía de San Gil durante 2021 debe ser la recuperación de los parques. Uno de los ejemplos más notorios en cuanto a la necesidad de inversión es el parque San Juan de Dios, también llamado ‘Parque de los Niños’, junto al coliseo Lorenzo Alcantuz.
En el lugar, a donde llegan padres de familias con sus hijos cada día, se evidencia el deterioro de la infraestructura en general: juegos de niños, zonas verdes, peatonales internas y máquinas de hacer ejercicio.
En el conocido juego del sube y baja hacen falta dos de las cuatro barras, en uno de los columpios para los más pequeños los escalones de madera empezaron a caerse y las sillas con base de cemento y asiento de madera de las mesas instaladas para jugar dominó parecen semidestruidas.
La falta de drenaje hace que el agua se acumule en el centro del parque durante las lluvias, en donde el terreno, por el deterioro, no es apto para que los niños corran o monten bicicleta, como acostumbran a hacerlo.
El parque además cuenta con una zona para que los deportistas practiquen calistenia – ejercicios en barras- que ya denota el paso del tiempo, el agua y el sol. Algunos de estas estructuras están a la mitad, ya oxidadas.
A esto hay que sumarle la falta de mantenimiento evidente en las zonas verdes.
En 2014, la alcaldía de San Gil hizo una inversión de $162 millones en la transformación del lugar en un parque temático dividido en tres mundos: Mundo Verde: grama sintética, dos juegos ecológicos, saltarines y una casa en madera; Mundo de Arena: con arena lavada, encerramiento en madera y un fuerte apache en madera rojiza; Mundo del Agua: suelo de goma, un barco y unos caballos en resorte.
Lo único que sobrevive de eso es el letrero en una esquina del parque y la grama verde sintética. De resto no hay nada.
El mismo abandono se evidencia en la zona de máquinas biosaludables, en donde las personas sufren más por el estado de las mismas que por los ejercicios que hacen.
El deterioro no es nuevo, en 2018, de esa inversión apenas quedaban los últimos rezagos. En 2019, previo al inicio de las campañas electorales, el hoy concejal Pablo Aldair Sarmiento hizo una intervención en el parque con el apoyo de algunos empresarios, recuperando los juegos de niños con pintura y otros trabajos de limpieza y ornato. Esos trabajos fueron después su carta de presentación en la contienda electoral.
De todos y de nadie
Indudablemente la responsabilidad sobre la recuperación del espacio es de la administración municipal. Lo que no está claro es cuál de las dependencias de la administración es la encargada de liderar el proceso y, por lo tanto, no hay un proyecto en este momento con este objetivo.
En la secretaría de Desarrollo Económico de San Gil, Rafael Acosta Wandurraga adelanta desde el año pasado la campaña ‘Parques vivos’, para recuperar los espacios verdes de los diferentes centros naturales del municipio, pero su responsabilidad iría hasta ahí.
Luis Francisco Ruiz, gerente de Acuasan, explicó que la labor de la empresa es la de macaneo y se espera en los próximos días hacer dichos trabajos.
Así mismo, Armando Villar, director del Instituto de Deportes y Recreación local, dijo que su responsabilidad estaría en la recuperación de los elementos de recreación biosaludables y las estructuras de calistenia. El funcionario indicó que en un proyecto de recuperación de algunos escenarios deportivos se estudiaría la posibilidad de incluir estas estructuras.
Lo que queda claro es la no existencia de un proyecto para hacer una recuperación general de este tradicional parque.